¡Hola! ¿Cuánto tiempo, eh?
Hoy sucedió un milagro y estoy con ganas de publicar otra
entrada en éste rinconcito mío del Internet (que tengo bastante descuidado, por
cierto) y no podía desaprovechar la oportunidad.
El tema del que voy a hablar en esta ocasión me da algo de
reparo, porque no me siento del todo moralmente autorizada a hablar del tema… y
sin muchas más vueltas, les cuento que el tema, como habrán visto por el
título, es sobre toda la polémica respecto a las nuevas entregas de Pokémon,
Pokémon Espada y Escudo.
¡Epa! No se emocionen, primero les voy a dar una larga
charla antes de pasar al tema principal (pero igual se la van a saltar si no
les interesa, así que no sé ni para que les digo).
¿Por qué no me siento moralmente autorizada?
Bueno: voy a aprovechar que esto prácticamente no lo va a
ver nadie para confesar algunas cosas… La primera de ellas, es que desde
pokémon amarillo no he jugado una versión original del juego… y para hacerlo
aún más infame, el juego se lo compré a un amigo… así que no hubo nada de
ganancias para los desarrolladores :´-D lo mismo pasó con la versión roja de mi
hermano menor y con la versión Cristal que le compró a un amigo suyo (para más
detalles, a quién le compré Pokémon amarillo era un amigo común que teníamos mi hermano
y yo… buenos tiempos, sí señor).
Lo siguiente es que he jugado los títulos de pokémon
básicamente en emuladores hasta Black and White… lo jugué y no lo terminé… y ya
desde diamante y perla había perdido la motivación… Ese día que pasé un buen
rato pescando un magikarp de nivel muy bajo para poder entrenarlo bien… me
sentí como que estaba haciendo un absoluto desproposito… ¡Vaya locura! ¿Para
qué hacerte la entrenadora competitiva si en tu vida ibas a luchar con alguien
que no fuera un NPC fácil de vencer con ítems y nivel? La verdad es que ya lo
sabía desde la segunda generación… no iba a luchar con nadie… pero aún así
perdía tiempo haciéndome la competitiva… y aún así me divertía; pero algo
cambió ese día que pescaba magikarps (re épica se puso la tipa xD), algo que
terminó de crecer y explotar en blanco y negro; ya no quería jugar a pokémon.
Yo dría que colgué la mochila a tiempo, porque como era de
esperarse, eran juegos que mi computadora de casi 10 años entonces no iba a
poder correr (ya sacaba la lengua para diamante y perla). Me quedé como una
simple espectadora desde hace ya 3 generaciones… ya no califico ni como
jugadora pirata… para colmo, el Internet me mal acostumbró a ya no querer
depender de horarios para ver un programa… y eso, sumado a lo que me molestó
que Ash perdiera la liga en Hoen, hizo que además me separara del anime; hasta
entonces, yo seguía lo más religiosamente que pudiera la emisión por Cartoon
Network, pero luego solo lo veía por curiosidad si es que lo enganchaba por
casualidad (aunque confieso que tengo ganas de ver la nueva temporada, que ésta
vez si que me llama poderosamente la atención).
En fin… que yo sé que no soy la fan más redituable para The
Pokémon Company… He comprado más juegos de pokémon que no le dieron un centavo a
la compañía a mi amigo, como el Pokémon Stadium o, en una tienda de segunda
mano, el Pokémon Snap; pero ¡hey, de niña compré muchos juguetes y cosas
oficiales, incluso compré cartitas oficiales hasta casi terminar el colegio!
(no confundir con TCG) he visto sus peliculas en el cine y.... ¡Ah, juego
pokémon SHUFFLE en el celular!
Otra cosa, y ésta si que me cuesta admitir, es que soy una
adulta patética… y sé que hay adultos más patéticos que yo, pero yo voy a
humildemente reconocer hasta donde me corresponda… Verán: ya tengo una edad en
la que ya me debería haber graduado, ser un miembro productivo de la sociedad,
pero sigo viviendo con mis padres, quienes cubren todas mis necesidades… he
batallado con la universidad y siento que mi agarre está tan flojo que en
cualquier momento tiro la toalla… no estoy muy motivada con la facultad… ahora
siento que me estoy tomando una especie de respiro luego de tanto sufrimiento
infructuoso… Desde la secundaria que no me va bien en los estudios… Nunca
quedé, pero siempre me llevaba muchas materias… y mi desempeño en la
universidad era para echarse a llorar… pasaron años hasta que “le agarrara la
mano” al tema de la vida universitaria… pero me tomó eso, años (para luego
volver a perder dicha mano). Hay muchas más cosas en mi vida que llevaron al
momento poco brillante que estoy atravesando ahora… pero lo quiero decir con
todo esto es ¿Cómo yo, una mala estudiante en la secundaria, una mala
estudiante de abogacía, adulta, iba a tener la cara de pedirle algo como consolas
y videojuegos a sus padres? Por eso me he alejado casi completamente de los
juegos; ese casi es porque veo game plays de los juegos recientes, uso las
versiones en japonés de las primeras generaciones para practicar el idioma y
sigo las noticias del juego casi solo para fantasear un poco que yo podré jugar
también y no perder de vista los temas de los que habla el Fandom.
Una cosa: seré patética, pero recuerden que yo soy yo: no
metan a todos los fans de pokémon, otakus, etc en la misma bolsa, por favor.
Bien: Si aun con todo lo que dije, toman por valido mi
juicio de fan adulta patética que no tiene dinero que aportar a la franquicia
de la que se está a punto de quejar, pues, pasen y siéntanse como en casa.
Más que quejarme, diría que voy a hablar como lo que soy,
una espectadora poniéndome en los zapatos de los verdaderos consumidores de los
juegos.