En clase de derecho romano.

Cada vez que puedo, participo en clase, y aunque me gusta, hay una materia en la que me ha empezado a molestar hacerlo…. En clase de derecho Romano.

Yo soy de sentarme en primera fila (no porque sea tan corta de vista, si no porque me ayuda a concentrarme y a aprovechar mas la clase); así que cuando la profesora necesita que alguien la asista con un código Civil, yo soy normalmente la que se ofrece a leer algún articulo de forma voluntaria.

Yo gustosa ofrezco el mío  casi sin pensar, pero a la profesora no le parece que busque lo suficientemente rápido, y cuando lo encuentro, ya le pidió a otro que lea, y me remarca mi demora.

Hoy me ha pasado de nuevo, e incluso le escuche decir en voz baja “a ver quien lo encuentra primero” refiriéndose a otro chico que también tenia el código. Yo no sabia siquiera que estaba en una competencia al momento de empezar a buscar, y esa es solo alguna de las cosas que me molestan.

Tarde décimas de segundo, casi lo encontramos al mismo tiempo, ecepto por una diferencia… ella me había puesto a buscar a mi primero, y como su impaciencia le hizo juzgar que buscaba lento (prácticamente solo me dejo voltear dos hojas antes de sacármelo), agarro mi código donde pensó que estaba mas próximo el articulo 955 (si mal no recuerdo), y me lo dejo en el 1125 mas o menos… (y eso que lo ubique a la misma velocidad que el compañero que lo encontró bajo sus propios criterios).

Cansada de esta situación guarde mi código, y la profesora tuvo que servirse de el de alguien mas.

Estoy cansada de ese bochorno constante y silencioso que siento cada vez que me ofrezco para buscar un articulo (porque muy pocos traen códigos civiles a clase de derecho romano, o eso parece porque casi nadie se ofrece) soportando que la profesora resalte que le parece que no encuentro el articulo rápido, que mis compañeros me juzguen, sacar el código al vicio, y terminar avergonzada leyendo el articulo en mi cabeza.

No creo que la profesora sepa en realidad como me hace sentir con esa actitud, así que no puedo culparla del todo por ello… estoy casi segura que si ella leyera esto, pensaría que estoy exagerando.

Me gustaría que comprendiera lo desalentador que puede ser para uno esas cosas, porque te quita las ganas de participar, y terminas afligida pensando ¿realmente seré tan mala buscando los artículos? ¿Acaso jamás estaré al nivel que la profesora exige, o la profesión requiere?

Ya les conté anteriormente que yo asistía a la U.N.S.T.A. En aquella universidad perdí dos cosas: Una “torerita” negra, que estoy segura que me robaron, porque en poquitos minutos desapareció del lugar en el que recordé haberla dejado (un lapso de tiempo tan corto, que para mi no da razones para creer otra cosa), y un código civil.

Precisamente, el código que uso en clase de romano y civil, es un repuesto del que me robaron en la U.S.N.T.A. y es de las poquitas cosas que puedo decir que compre con mi dinero (dinero que no provino de mis padres). Tengo razones de peso para creer que me lo robaron por esa costumbre que tengo de mostrarlo en clase.

Participar es algo que me gusta hacer siempre que puedo, ya que disfruto sintiéndome útil, y me incentiva a estar bien atenta en clase. Yo personalmente, saco el código casi por inercia, porque mi entusiasmo me manipula, antes de detenerme a pensar “Para que sacarlo, si va a ser lo mismo, y encima me arriesgo a que me lo roben” (sin intención de ofender a ningún integrante de mis cátedras).

Al fin y al cabo, participar en clase de romano se convierte en una pérdida de tiempo para mí porque tengo que sacar el código y buscar los artículos (y que los termine leyendo otro) y para la profesora, que debe esperar a que “me tarde” para darle paso al alumno mas cercano con código, y con ganas de participar.

Probablemente ella nunca entenderá porque, en lo sucesivo, prefiero dejar a mi código durmiendo en la mochila durante sus clases (además, no es obligatorio llevar código civil a clase de romano).